Sonó la alarma y de inmediato supe que el peligro rondaba, nos trasladamos al lugar del llamado, resultó ser una casa sucia, aparentemente abandonada, pero las apariencias engañan y no todos los hombres son buenos, siempre me sorprendo del daño que son capaces de causar a su prójimo, pero estoy entrenado para proteger sonrisas, para salvar vidas y para detener el crimen. Soy un Oficial Canino, mi nombre es Bonne.
Comentarios
Publicar un comentario